martes, 13 de mayo de 2008

"Un abrazo, un beso y unas palabras"


No puedo explicar la horrible sensación que tuve cuando me desperté a la noche. A la tarde lo habían enterrado y pasé toda la noche anterior sin dormir junto a mis familiares que me acompañaban en el peor momento de mi vida. Quizás si pudiera volver el tiempo atrás, no me hubiese despegado ni un segundo mientras descansaba eternamente bajo la cruz. Aunque si pudiese volver el tiempo atrás, lo abrazaría, le daría un beso, le diría "Te Quiero" y le pediría que no se vaya.

Cuando desperté al día siguiente sentí que me faltaba el aire, era la angustia que me oprimía el pecho; es difícil que "caiga la ficha", nunca terminas de entender el por qué y esa angustia perdura por mucho, mucho tiempo.

Recuerdo todo como si hubiese sucedido ayer, verlo sentado en la sala de espera del sanatorio, con los ojos abiertos y su pecho quieto, sin respirar; la desesperación no me anuló la cabeza, no dejé que el pánico se apodere de mi y actué rápido. Pero todo fue en vano, el destino estaba marcado, había llegado la hora de que se vaya para siempre.

Solo espero que descanse en paz y deseo que el día que llegue mi hora pueda reencontrarme con él para poder darle un abrazo, un beso, decirle: "Papi Te Quiero Mucho" y le diría...

"VENGO A QUEDARME CON VOS PARA SIEMPRE"


Barbye. 12/05/08